Tengo que confesar, y me duele, que como Paul Pierce en sus inicios, hubo un tiempo en el que apoyé a los Lakers, era un neófito en la NBA, y tampoco sentía mucho por esta competición, así que siguiéndola de refilón, preferí que los Lakers ganaran la final de la NBA en 2008, cosa de la que me arrepiento muchísimo.
Me convertí en Celtic en un viaje de mi familia a Nueva York en 2009. Visitamos la antigua y enorme NBA Store en la Fift Avenue, y nada más entrar, ahí la vi, la camiseta blanca con el 34. No me había planteado comprar ninguna camiseta de la NBA pero, sin motivo, dije, "ésta".
Jamás imaginé, cuando compré la camiseta de Pierce, que sentiría lo que hoy siento por los Celtics. Como Steve Jobs dijo en su discurso de Stanford, hay que atar los puntos hacia detrás, y si aquel día no me hubiese llamado la atención esa camiseta, probablemente no hubiese elegido Boston como destino para pasar unos meses increíbles de mi vida y, probablemente, no hubiera descubierto en su plenitud lo que es el mundo verde.
Desde aquel verano de 2009, siempre apoyé a los Celtics pero de una manera superficial. Despertaba y miraba en resultado en internet, pero no era ni mucho menos un crazy fan como lo soy ahora.
La final de 2010 fue el punto de inflexión. Fue dolorosa, una demostración de lo que es el Pride, el enganche definitivo. Ahí supe que los Boston Celtics son algo más que un equipo de baloncesto.
Que esta introducción sirva de penitencia. Quería compartir mi sentir, como arrepentido estoy de haber apoyado a los amarillos en el pasado...soy celtic desde hace relativamente poco, pero después de estos meses en Boston, siento como si hubiese sido de los C's durante toda mi vida, ha sido un intensivo Céltico.
3 días después de conmemorar el 20º aniversario de este partido, la casualidad haría que en el TD Garden se vieran de nuevo las caras en un nuevo séptimo partido de Playoffs -esta vez Semifinales de Conferencia- Sixers y Celtics. (Leer crónica 2012)
En la crónica de este año hablábamos de miedo. Del miedo que suponía recordar lo que ocurrió entonces, el 23 de mayo de 1982.
Bill (Fich) contra Billy (Cunningham), Bird contra Dr J y un chico de 24 años llamado Andrew Toney como auténtico protagonista de una sangría en casa ajena de la que participaría como verdugo principal.
The game
Kevin McHale y su entrenador, al más puro estilo Fich, arrodillado sobre una toalla, asistían a un intercambio inicial de canastas de las que Larry Bird y Bobby Jones recogían los primeros comentarios de Dick Stockton y Bill Rusell, que comentaban el partido para la CBS, que emitía el partido desde el Garden para toda la nación.
Diversas imprecisiones locales, fruto de un aparente nerviosismo, dieron las primeras ventajas a Philadelphia, propiciando que Fich moviera el banquillo dando entrada a McHale y Danny Ainge, que jugaría sin saberlo sus últimos minutos comorookie. La entrada de los dos jóvenes apretó algo el marcador, que acabaría 30 - 27 para los visitantes al final del primer parcial.
El segundo cuarto empezó con unos Celtics más agresivos. Una rápida contra de Larry Bird culminó un parcial de 5-1 que puso por delante a los locales. Con Henderson en el banco, Danny Ainge asumía el papel de base con Chris Ford, que acababa de entrar en cancha, como escudero en el backcourt. Y no lo hizo mal. Fruto de su agresividad sacó una falta a Julius Erving que acabó en 2+1 y 3 puntos de margen mediado el cuarto, algo que no gustó a Dr J, que un minuto después haría lo propio tras robarle un balón al novato procedente de la universidad de Brigham Young
Con Bird desaparecido y Dr J discreto, fueron los 15 puntos de Bobby Jones -venía promediando 10 p.p. en estos playoffs- los que resultarían decisivos para inclinar la balanza a favor los visitantes al descanso.
Un parcial de 6-0 culminado en un mate de DR J tras tapón a Robert Parish ponía el +11 al poco de iniciarse el tercer cuarto. Así hasta la tempranera quinta falta de Gerald Henderson, que daba más minutos a Danny Ainge. Con él en pista, un parcial de 8-0 devolvía la vida a los locales.
Pero llegó el momento de A. Toney, principal artífice del 31-22 para los Sixers en un tercer cuarto que Dr J cerraba con una canasta sobre la bocina.
El último cuarto devolvió a Gerald Henderson a la pista. 5 puntos suyos dieron algo de vida a un equipo que, pese al esfuerzo, solo verían a los Sixers de lejos y con la impotencia de no conseguir bajar de los 10.
Con 96 - 82 en el marcador, el cuarto mostraba las vergüenzas de los locales en el tiro. Un pésimo 33% nada podía hacer frente al 71% de los de Pensylvannia.
Era el momento de Rick Robey. A la desesperada y esperando que se repitiera su gran actuación del primer partido, en el que anotó 19 puntos, Fich pareció jugarse, sin demasiada confianza, su última carta.
Pero ni por esas. La primera que tuvo Robey, una sencilla bandeja, no quiso entrar. La falta de concentración era tal que Dr J se permitió culminar un alley-hoop tras saque de banda.
Con el equipo 17 abajo (102 @ 85) , Fich pidió tiempo.
Tras el mismo, en una de tantas con la vista puesta en la remontada, un tiro de Larry Bird acabó en un airball. Con Auerbach viéndolo desde la grada, el partido, la eliminatoria y la temporada acababa para los campeones del mundo.
Con medio minuto por jugarse, el Garden, lejos de bajar los brazos, empezó a calentar las finales eligiendo, pese a todo, a los Sixers como favorito para llevarse el anillo. El"Beat LA, Beat LA, Beat LA..."empezó a corearse de menos a más hasta llegar a poner la piel de gallina.
Plantillas
Sixers: Maurice
Cheeks, Andrew Toney, Julius Erving, Bobby Jones, Caldwell Jones,
Lionel Hollins, Steve Mix, Darryl Dawkins, Mike Bantom, Earl Cureton,
Clint Richardson
Celtics:Gerald
Henderson, M.L. Carr, Larry Bird, Cedric Maxwell, Robert Parish, Tiny
Archibald, Kevin McHale, Rick Robey, Danny Ainge, Chris Ford, Charles
Bradley
Hace un par de meses dos ilustres del mundo Celtic en España como Lartaun de Azumendi y Antonio Rodríguez, convocaban a través de Twitter a la numerosa parroquia Celtica para tratar de establecer un censo "oficioso" y un punto de encuentro y recogimiento a la esparcida comunidad verde de habla hispana.
Como un simple recuento no iba a llevarnos a puerto alguno, se creó una lista de Twitter que permitiera el contacto interactivo sin necesidad de poblar el Time Line de los usuarios. A día de hoy esa lista cuenta ya con332 miembros y 123 suscriptores.
La lista, en la que quedas incluido como miembro twitteando el hashtag #CelticsEspaña, se ha convertido en perfecto foro de debate en horario de partido y está permitiendo conocer y unir a aficionados de todos los puntos del territorio español y latino américa.
PERSONALIZA TU AVATAR
Gracias a @maquinadehuesos , ya es posible personalizar tu avatar de twitter con el logo de #CelticsEspaña. De momento hay dos versiones disponibles :
Nota: Si no dispones de Photoshop o necesitas ayuda con la personalización del avatar, puedes contactar con @maquinadehuesos , @homiemoe , Iván Toribio o @jesusaraujo33 , que se han prestado amablemente para la ayuda técnica.
Bajo la gestión de Dani Rodríguez Martín y Richi Azpe, la comunidad Celtic en España tiene también su sitio en Facebook, entra en ella pinchando aquí .
"Reconozco no tener ninguna idea del Baseball, y que cuando me refería a él, siempre decía que era un verdadero aburrimiento, pero poco a poco le he cogido el truquillo, hasta el punto de parecerme entretenido.
Es lo que tiene que se hayan acabado las temporadas de los deportes más entretenidos, a mi parecer. Para los americanos, lo creáis o no, el Baseball es el deporte mas seguido en el país, seguido por el futbol americano y, en tercera posición, el baloncesto.
En los Red Sox, que estuvieron más de 80 años sin ganar unas World Series, este año están de cumpleaños. Fenway Park se hace centenario bajo el lema "The most beloved Park in America", y no le falta razón, es un estadio con mucho encanto, un emblema en Boston.
"vaso de souvenir por $ 8 y lo puedes rellenar
tantas veces como quieras"
Cuando entras es como si viajases hacia atrás en el tiempo, se respira la tradición del baseball y de los Estados Unidos. El estadio es totalmente abstracto, no sigue ningún patrón arquitectónico y en él se encuentran los asientos mas famosos de la ciudad de Boston, los "Green Monster Seats" una enorme pared horizontal que recibe el nombre de la mascota de los Red Sox.
Desde hace casi diez años, en cada partido, Fenway Park cuelga el cartel de "No hay billetes". Me llamó mucho la atención ver señores muy mayores, subiendo las escaleras con dificultad, con sus nietos de la mano y ataviados con todo el merchandising de los Red Sox. A mitad partido, el estadio se pone en pie, levantan sus brazos y cantan "Sweet Caroline" de Neil Diamond. Brutal"
Como sabéis los Celtics comparten pabellón con los Bruins. El equipo de Hockey se hizo el año pasado con la Stanley Cup (NHL) a la heroica, ganando en el 7 partido en Vancouver por 4-0.
No tenía ni idea de lo que iba este deporte, pero claro, estando aquí, sería casi pecado no ir a ver un partido.
Fui a varios, en uno de ellos contra los Washington Capitols, en los que milita, según me dijeron, el LeBron James de la NHL, Alex Ovechkin (aun no sé por qué le faltan dos dientes). Enseguida supe quién era porque se llevaba todos los pitos.
Del hockey me sorprendieron dos cosas. La primera el frío que hacía en el Garden y la segunda la violencia con la que juegan. Se pasan todo el partido empujándose entre ellos y contra los cristales. Cuando fui, lo único que quería ver era una pelea, la cual solamente se para por dos motivos, cuando uno de los dos jugadores cae al suelo, o cuando la pelea es aburrida.
Rajon Rondo. Se plantea un verano tranquilo para el base. Con 3 años más de contrato por delante a razón de $ 11 M , $ 12 M y $13 M. Sigue.
Jason Terry. Un contrato de 3 años a razón de $ 5 M por temporada le colocan en Boston. Su edad (35 años) me hacen desconfiar de ese último año en el que defendería la camiseta de los Celtics con 38 años.
E'Twaun Moore. Su bajo salario -un año a razón de $ 0.7 M.- y el buen rendimiento ofrecido por el guard en los pocos minutos que pudimos verlo en la 2011-12 le dan ciertas posibilidades. Boston tiene en su mano la renovación. De momento jugará la Summer League y de su rendimiento en ella dependerá la decisión.
Avery Bradley. Tras explotar en el tramo final de la pasada temporada, Boston cuenta con él y, al igual que Rondo, no entra en planes de traspaso. Tiene un año por delante para asentarse y evitar que Boston ejerza la opción de cortarlo a final de temporada. $1.6 M , $ 2.5 M (Team option) y $3.5 M (Qualifying Offer)
Sasha Pavlovic. Siguiente.
Keyon Dooling. Agente libre y a la espera de noticias. No parece que Boston vaya a hacer nada hasta que se solucionen los temas con Allen, Green y Bass. Su buen papel en los playoffs y la falta un base puro que de minutos de descanso a Rondo -ni Bradley, ni Terry, ni Moore lo son- le dan ciertas posibilidades de seguir.
Ray Allen. Pese a los rumores iniciales que colocaban al bueno de Allen en Miami, una presumible oferta de 2 años a cambio de $ 6 M por temporada y la promesa de una cláusula antitrades, pueden haberle hecho cambiar de opinión. Mi opinión es que ni por esas. Ray es un tipo que a estas alturas de su carrera no se mueve por dinero. Ayer visitó las instalaciones de los Heat, hoy ha pernoctado en la ciudad y, tras cancelar su viaje a Los Ángeles -Los Clipps han optado por renovar a Billups y firmar a Crawford-, hoy se vuelve a ver las caras con los dirigentes de Miami Heat.
Paul Pierce. La edad y sus emolumentos ($ 16.7 M y $ 15.3 M), hacen difícil que el californiano no cumpla con los dos años de contrato que le quedan en Boston. Traspaso supuestamente inviable.
OJ Mayo. Gusta y mucho, quizá más a la afición que al propio Danny. Clase y juventud por encima de cualquier otra cosa. Sus líos con los fármacos y las peleas, en manos de Doc Rivers, deberían ser cosa del pasado y a eso nos agarramos para pedir a gritos su contratación. La llegada de Terry y una posible renovación de Allen ponen el freno a su llegada. Veremos.
Mickael Pietrus. Mientras espera la llamada de Danny, su agente ya han contactado 4 equipos y un entrenador. No parece especialmente nervioso y confía en volver. Al igual que con Dooling, la decisión de Boston dependerá de lo que llegue. No es prioritario.
Kris Joseph. Pick #51. Desde la misma noche del draft la gerencia de los Celtics advirtió de lo difícil que va a ser ver a 3 rookies en el equipo. Inscrito para el Summer Camp, deberá demostrar su calidad con grandes -grandísimas- actuaciones si su intención es seguir vistiendo de verde en noviembre. De inicio complicado.
Marquis Daniels. Tras una regular season decepcionante, cuajó unos salvables playoffs gracias a su defensa. Insuficiente para seguir, en todo caso. Si por mi fuera no seguiría.
Jajuan Johnson. El Forward cumplirá su segundo año en la Liga con la intención de ganarse los minutos necesarios para aconsejar su regreso en la 2013-14, ya que pese a tener firmados éste y 3 años más, los dos siguientes no son garantizados, y Boston tendrá la opción de no contar con él en el Roster. (Salario 2012/13: $ 1.12 M) . En caso de buscarse un trade puede ser candidato a entrar en alguna operación. De momento jugará la Summer league con Boston.
Brandon Bass. Pese a tener garantizado un año más en Boston, su gran temporada y el empuje de su agente, animaron al Forward a renunciar a su contrato con vistas a mejorar sus ingresos bancarios. Sin alargar demasiado el culebrón, parece que el acuerdo entre ambas partes es total desde ayer. $ 20 M a cambio de vestir durante tres temporadas la camiseta de los Celtics.
Jeff Green. Existe sintonía entre ambas partes y su vuelta parece estar hecha. Esta noche se ha filtrado un contrato de 4 años a cambio de $ 40 M. Su agente se está encargando de publicitar la buena salud de Green, del que dice que la operación ha hecho de él el jugador con menos riesgo de padecer un infarto de toda la plantilla. Lo que toca por otra parte. Ainge confía en él y el trato está solo falto de oficialidad
Kevin Garnett. Según informaciones del Boston Herald, existe un acuerdo de renovación de 3 años más a razón de $ 34 M , siendo el último año de carácter opcional. Buena noticia la renovación, mala noticia las cantidades.
Jared Sullinger. Publicitado como robo del draft desde el mismo momento de su elección con el Pick #21, el talento de Jared se verá en Boston si su espalda y Doc Rivers lo permiten. Sano debe ser importante desde el primer día. Otro de los que hay que seguir este verano.
Fab Melo. Elegido en el Pick #22 por Boston, tiene mucho que aprender. Rocoso, defensivo, saltarín y con muchos movimientos al poste que debe copiar de Sullinger. Contamos con él para chupar banquillo. De momento, la semana que viene, lo veremos en la Summer league de Orlando.
Greg Stiemsma. Con el cartelito de Qualifying Offer en su millón de dólares escaso de salario, el caso de Stiemsma se ha convertido en una incógnita tras la llegada de Sullinger y Fab Melo. Una posible llegada de Marcus Camby o el regreso de Chris Wilcox, ambos agentes libres, haría que Boston no peleara demasiado por él pese a su gran temporada de debut.
Sean Williams. Boston tiene una opción para alargar un año más el contrato. De momento jugará la Summer League, pero tras la llegada de Sullinger y Melo no parece que Boston vaya a perder un minuto más en él. Stiemsma y Wilcox le preceden para el puesto.
Ryan Hollins. Más de lo mismo. Suena para Europa (¿Real Madrid?).
Jermaine O'Neal. Puede seguir esperando con una piña colada en Bahamas.
Chris Wilcox. Su agente ha declarado que, tras los problemas cardíacos detectados mediada la temporada pasada, Chris está listo para reaparecer en 2012. Lo mismo que Green, vaya. Tras unas semanas en North Carolina, donde ha estado realizando trabajo físico, el center tiene pensado trasladar ahora su sede de entrenamientos a Houston, donde se pondrá a las órdenes de John Lucas. De momento en Boston no lo han descartado y si el mercado se tuerce es una posibilidad con la que jugará Ainge.
Uno de los descubrimientos del año en #LaButaca ha sido el de @tonypains . Valenciano, seguidor de los Celtics y afincado temporalmente en Boston. Un Cocktail molotov. Con la excusa de la Eurocopa iniciamos con él un serial en el que nos contará sus correrías por Bean Town.
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"La verdad es que aquí no se le hace mucho caso al fútbol. Lo único bueno es que los horarios de la Eurocopa coincidían con la hora de comer, así que todos los bares ponían los partidos sobre las 2:30
Salvo dos días fui fiel a un bar cercano a Quincy Market, quien vaya a Boston debe de ir al Sissy K's, comida y cerveza muy barata, @AntonioGil_SOSE y @33hidalgo lo saben. Es curioso lo que sentía cuando iba a ver los partidos con la camiseta de España, había personas que miraban raro y de repente te decían: "VIVA ISPANIA", con un tremendo acento americano.
Hay mucha gente que nos empieza a tener manía por el hecho de que siempre ganamos y van en contra de nosotros.
Del desarrollo de la Eurocopa no os daré detalle alguno, que ya lo sabéis bastante bien. Cuando acabó la Final, miré a mi amigo Luis (madrileño) y nos dijimos, ¿ahora qué?
Tony en el Common Park
Barajamos incluso ir al Northen (Little Italia en Boston) para celebrarlo allí, pero rápidamente lo descartamos entre risas, ya que queríamos volver vivos a España. Finalmente decidimos ir a una fuente a meternos para celebrarlo.
Fracasamos en nuestro primer intento. Eran unos chorros de agua repletos de niños y cuando aparecimos por allí un grupo de unas 15 personas con camisetas y banderas de España, los padres nos miraban con caras de bastante desconfianza, seguramente pensaron que éramos hooligans.
Nuestra siguiente parada fue el Boston Common Park. Ahí si que conquistamos absolutamente TODAS las fuentes del parque, y al vernos en lo alto de las fuentes y gritando, muchas personas que estaban en el parque se acercaban para grabarnos en vídeo y
echarnos unas fotos.
Era una alegría cruzarte con más españoles en el parque y unirte en los cánticos y celebraciones, al mismo tiempo que pasaban coches tocando el pito y con banderas de España. Tras habernos metido en las fuentes del Common Park y haber toreado en el Public Garden, nuestra fiesta acabó a las 8 de la noche, no queríamos ser deportados"
Me convertí en Celtic en un viaje de mi familia a Nueva York en 2009. Visitamos la antigua y enorme NBA Store en la Fift Avenue, y nada más entrar, ahí la vi, la camiseta blanca con el 34. No me había planteado comprar ninguna camiseta de la NBA pero, sin motivo, dije, "ésta". 
Que esta introducción sirva de penitencia. Quería compartir mi sentir, como arrepentido estoy de haber apoyado a los amarillos en el pasado...soy celtic desde hace relativamente poco, pero después de estos meses en Boston, siento como si hubiese sido de los C's durante toda mi vida, ha sido un intensivo Céltico.
