lunes, 22 de julio de 2013

Volver a empezar (una y otra vez)

VOLVER A EMPEZAR (UNA Y OTRA VEZ)
SUEÑOS Y DESPERTARES DE BRIAN SHAW
JOSE PÉREZ | JULIO 2013
@jose13bis on twitter





En 1966 Gran Bretaña reconocía la independencia de la República Cooperativa de Guyana, el presidente Johnson firmaba una proclamación para declarar el tercer domingo de junio como día del padre en los Estados Unidos y un chico llamado Brian nacía en la ciudad californiana de Oakland.


***


Imaginemos por un momento a ese gran mecánico afroamericano de 120 kilos, ese era Charles Shaw. Un tipo enamoradizo que cayó en manos de una joven universitaria Guyanesa por nombre Barbara.

Brian y Mónica vendrían después, la lógica consecuencia del amor.

Con ellos las visitas anuales a Guyana, un pequeño y humilde país atlántico situado al norte de Brasil, donde Bárbara mantenía gran parte de su familia, a la que seguían viendo un verano tras otro.

A la hora de facturar, maletas llenas de ropa que volvían a casa vacías. "Cuando eres un crío no logras entender eso. Yo decía, 'Éstos son mis vaqueros favoritos o mi chaqueta favorita', pero ellos no tenían nada. Esos viajes nos ayudaron mucho para valorar lo que teníamos" recuerda Brian.

Explica Arash Markazi en su artículo "Brian Shaw perseveres despite tragedy" , que con la poca ropa que les quedaba cuando regresaban a casa, Brian botaba y botaba frente al aro que su padre le había colocado sobre la puerta del garaje

Hasta que un día el balón botó en parqué. 

Procedente de la pequeña Universidad de California-Santa Bárbara, donde guió a 'Los Gauchos' a su primer NCAA Tournament, el sueño de Brian era vestir la púrpura y oro de Los Angeles Lakers, que habían invitado al chico a unos workouts previos al draft.

Jerry West, Mitch Kupchak y Ronnie Lester quedaron tan encantados con lo que vieron, que le dieron su palabra de quedarse con él si seguía siendo elegible en su última selección de primera ronda.

Solo quedaban dos equipos por elegir, Boston y Los Angeles.

El día del sorteo, tras 23 elecciones y rodeado por familiares y amigos, Brian estaba ya listo para ponerse la gorra de los Lakers.

"Recuerdo a mi madre llorando. Ella gritaba, '¡no! ¡no, los Celtics no!'". Y es que, al llegar a Boston, David Stern pronunció el nombre de Brian Shaw antes que el de David Rivers, la resignada elección de los Lakers.

A disgusto o no, acabó por hacerse un hueco en el segundo mejor equipo de novatos de aquél año (6º en votos). Méritos hizo aquél único Celtic en jugar todos los partidos de su primera temporada, 54 de ellos como titular; el novato con más presencias de partida en Boston desde Larry Bird en la 79/80.

Pero todo ello no sirvió para que los Celtics se presentasen en verano con un contrato de renovación medio decente, despiste aprovechado por Raul Gardini y el Grupo Ferruzzi para tentar al chico con un millón de dólares a cambio de una temporada en Il Messagero de Roma, casi 7 veces más de los $ 150,000 que había estado cobrando como rookie.

El cebo estaba echado.

Una manzana apetitosa y el poco arraigo de un californiano en Massachussets, fueron más que suficientes para salir por patas del Edén en cuestión de días, los que dieron paso a un feliz año en Italia de donde, además, se trajo un buen botín.

Allí jugaría contra Joe Bryant, enrolado en las filas el Cantine Riunite Reggio Emilia. Fue entonces cuando conoció a un chico de 10 años, por nombre Kobe, que hacía de recoge-pelotas en los partidos que el equipo de su padre jugaba en casa. "Nosotros estábamos calentando antes del partido y él estaba allí, tirando unos tiros y retándonos a que jugásemos un 'HORSE' con él. Yo le decía, 'Vamos, niño, que estoy tratando de calentar un poco'".

Pero al poco de llegar, el 26 de enero de 1990, Shaw alcanzaba un nuevo acuerdo de 5 años y $ 6,200,000 para volver a Boston el verano siguiente.

Todo parecía preparado para la vuelta del hijo pródigo, hasta que "un ligazón con el club romano" esgrimido por su agente, evocaba la voluntad del chico de seguir en Italia, un año más, en base a la opción que tenía firmada.


Shaw y Ferry con la elástica de Il Messaggero (Fuente: gazzetta.it)

Los que se habían llenado la boca criticando a Shaw por anteponer los dólares a la NBA, tendrían ahora que esconderse. El jugador optaba por seguir en Roma perdiendo dinero y enfangándose en una incomprensible duplicidad contractual.

Tras un verano salpicado por la polémica, David Mazzonne, Juez del Tribunal Superior de Boston, acabaría por darle la razón a unos Celtics que, llegado el mes de septiembre, convocaron una rueda de prensa conjunta con el propio Shaw para oficializar su reincorporación al equipo, lo que se produjo el 17 de septiembre de 1990.

BRIAN SHAW: "Sé que tenía firmados dos contratos, pero no sabía como deshacer el pacto con uno de ellos. Quise quedar bien con todo el mundo, porque en Italia me trataron muy bien".


***


Los ceros que aquél año Brian había añadido ya a su cuenta corriente le permitieron hacer un buen regalo a papá, un Jeep Cherokee por el día del padre.

Habían pasado 6 años desde su lanzamiento en el mercado americano, pero el Cherokee seguía siendo la leche. La pieza con la que completar el puzzle de casa, jardín y perro juguetón de la nueva familia americana.

Y mientras Charles se entretenía llevando a los chicos del barrio de pesca o a ver partidos de baloncesto en su nuevo Jeep, Brian jugaría temporada y media más en Boston antes de ser traspasado a Miami Heat a cambio de Sherman Douglas.

Recién iniciada su primera temporada completa en Florida, a Shaw se le ocurrió un nuevo regalo. "Mi padre amaba el boxeo y mi madre los espectáculos, así que decidí comprarles una casa en Las Vegas para que  pudieran bajar cuando quisieran e ir a las peleas de boxeo y los espectáculos" recogía años después Arash Markazi.

Acabada la temporada, la familia al completo se disponía a celebrar el 24º cumpleaños de Mónica en la nueva casa. La intención era haber salido a media tarde pero Charles, que apuraba sus últimos días como mecánico de la flota automovilística de correos, no llegó hasta las 9. 

Viernes noche, atrás una dura semana de trabajo y un largo viaje de 8-10 horas por delante.

Pensó en posponerlo, pero Bárbara y Monica estaban como locas por llegar a Las Vegas; así que fue solo un fugaz pensamiento antes de asomarse por la ventanilla para intercambiar unas palabras con Brian, que se había quedaba en casa para darle una fiesta barbacoa a su novia Nikki, "Cuando lleguemos, te llamo para que sepas que estamos bien".

Pensaba reunirse el domingo con su familia en Las Vegas.

Tras más de 8 horas en la carretera, habrían pasado ya unos 15 minutos desde que el Jeep de Charles dejase a la derecha el desvío que conduce al desierto de Mojave, en el aun condado californiano de San Bernardino. Con 1,6 millones de hectáreas, el tercer Parque Nacional más grande de los Estados Unidos continentales.

Pura monotonía al volante, a la derecha del cual Barbara dormía plácidamente.

En los asientos traseros Mónica y Brianna, hija y nieta de ambos, hacían lo propio a poco menos de 10 minutos de llegar a la nueva casa en Las Vegas.

Con la noche como compañero, Charles podía ver ya a lo lejos el resplandor de la ciudad de los casinos.

Hasta que, a solo 9 millas, dejó de verla.


Interestatal 15, llegando a Las Vegas (Fuente: Google street view)


En su artículo, Arash Markazi explica que la Patrulla de Carreteras de Nevada llegó a la conclusión de que se quedó dormido al volante. Su Jeep golpeó la divisoria y dio varias vueltas de campana. Cuando los agentes llegaron, Barbara y Mónica habían muerto. Charles lo hizo una hora más tarde en el University Medical Center de Las Vegas (1)

"Cuando sonó el teléfono eran las 8:30 de la mañana, yo estaba pensando que eran ellos diciendo que habían llegado", recordaba Shaw. "Era la oficina del forense."

Junto a él estaba Nikki. "No dijo nada. Simplemente se sentó y escuchó mientras yo le miraba sin saber lo que estaba sucediendo (...) Salió de la habitación y caminó por el pasillo, era muy extraño. Se quedó parado y no dijo nada. No sabía qué hacer. Finalmente se descompuso y me contó lo que había sucedido. Fue la cosa más devastadora que jamás puede imaginar".

"Tenía 27 años, nunca había perdido a nadie cercano a mí y acababa de perder mi familia completa". 

Milagrosamente la pequeña Brianna de 11 meses, a la que su hermana Mónica había bautizado así en agradecimiento al apoyo que recibió de Brian durante el embarazo, salvó la vida.


***


Shaw & Lewis
En el otro extremo del país, su gran amigo Reggie Lewis lloraba las pérdidas como propias.

Brian y Reggie, mantenían una buena amistad desde que se conocieron en Boston. "Nos llevamos bien inmediatamente. Comíamos juntos en las giras y todo lo hacíamos juntos", explicaba Shaw años más tarde del hombre que le había introducido en las muchísimas particularidades de aquél equipo plagado de veretanos.

Pese a no hacer demasiado que Reggie y Donna habían tenido su primer hijo, esperaban ya el segundo cuando cogieron el vuelo a Oakland para acudir a los funerales y quedarse unos cuantos días con Brian; no demasiados porque, tras su reciente colapso cardíaco, a Reggie debían operarlo a corazón abierto una semana después.

Antes de que Lewis tomara el vuelo de regreso a Baltimore, quedaron en verse de nuevo el próximo mes en Boston para entrenar y mantener la cabeza ocupada.

Dos semanas después todo parecía haber salido bien. Así se lo contaba por teléfono un esperanzado Reggie, antes de salir hacia la Universidad de Brandeis para lanzar unos tiros. Ambos buscaban retomar el camino del que les había apartado la amiga mala suerte. Y deseaban hacerlo juntos.

Esa misma tarde Brian recibió una segunda llamada de Boston. Era Jeff Twiss, Director de relaciones públicas de los Celtics."Sé que estás lidiando con mucho, y no te llamo con una buena noticia. Reggie ha fallecido".

El silencio.

Ahora era Shaw el que tomaba un vuelo con destino Baltimore para despedir a su amigo y acompañar a Donna.

De vuelta a casa solo Nikki y Brianna.

La historia de Brianna es la de la esperanza a la que agarrarse. Los brotes verdes que ves crecer entre la maleza y te mantienen vivo, como un zombie, pero vivo al fin y al cabo pensando que sigue habiendo algo por lo que luchar.

Él había sido el primero en verla caminar, cuatro complicados pasos de salida atraídos por el repicar de sus llaves, y él iba a ser el primero en verla hacer todo lo demás.

Sólo había un obstáculo, el padre biológico de Brianna, al que finalmente arrebataría la custodia legal de la niña. Una niña que en adelante viviría con Marie, la tía de Brian, en Oakland. Allí esperaría las visitas de éste cuando sus trabajos en Miami y Orlando se lo permitieran. 

Recuerda Brian que "Tenía 13 años cuando la llevé al cementerio por primera vez, entonces entendió realmente lo que había sucedido. Vio las lápidas con las fotos de mi hermana, mi madre y mi padre. Pasamos un rato allí sentados. Le conté aquella vieja historia y empezó a llorar". 

Para entonces a Brianna se habían unido ya dos 'hermanitos', Brian Jr. (BJ) y Bianca. Buenas noticias donde un día no las hubo.


De izq. a Dcha: BJ, Brian, Bianca, Nikki y Brianna [Fuente: Matthew Jordan Smith Photography]


***

En 1999, 
una lesión en la mano derecha de aquél niño con el que no quiso jugar un 'HORSE' 
le permitiría fichar, 10 años más tarde, por sus amados Lakers, donde se retiraría definitivamente del baloncesto profesional con 36 años y tres anillos de campeón.
(2000, 2001 y 2002)


***


___________


(1) Habían transcurrido 19 días desde otro fatal accidente, el que se llevó para siempre a Dražen Petrović en Denkendorf, Alemania.


FUENTES
  • Arash Markazi ."Brian Shaw perseveres despite tragedy". ESPNLosAngeles.com (12.05.2011)
  • Benjamin  Hochman. "Survival shaped new Nuggets Head coach Brian Shaw" . Denver Post (2013)
  • LA Times, Foros - 20 abril 2003
  • Gigantes del Basket. Hemeroteca 1993





8 comentarios:

  1. Muy buen artículo Jose, desconocía las tragedias familiarias de Brian Shaw.

    Que sonado fue aquello de Shaw y Ferry a Roma, era algo totalmente increible que una liga europea le birlase jugadores a la NBA.

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    1. Gracias Quique,

      Y a Ferry & Shaw les sustituyeron Cooper & Radja. Casi ná.

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  2. Gran pieza amigo. No conocía el dato o no recordaba que Lewis había sido operado cuando murió, incluso por segunda vez?

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    1. Tampoco yo. Según leí de unas declaraciones del propio Shaw, una semana después del accidente de sus padres es cuando debían colocarle un desfibrilador en el corazón. A mi me sonó también un poco a chino, pero es lo que decía Shaw.

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  3. Enhorabuena Jose. Escogistes la historia por algun motivo o te la encontrastes por azar? Yo tambien desconocia la tragedia de los Shaw.

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    1. Si te soy sincero, la intención era escribir sobre todo el entramado jurídico que había detrás del segundo año -que al final no se dio- con Il Messagero. Esta historia me la encontré mientras investigaba lo primero, ... al final se quedó como plato fuerte.

      Abrazos

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  4. Es triste pero es historia (que desconocia completamente) y ya sabemos que no siempre nos reimos con ella. Me ha encantado como lo has contado y gracias por enseñarnos el "otro lado" del baloncesto.

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    1. Gracias Charlie, recuperar estas cosas es lo que más nos gusta en la Butaca.

      Abrazos

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